CAMINAR EN ÁREAS VERDES AYUDA A CALMAR NUESTRO CEREBRO
Caminar por zonas rodeadas de árboles relajará tu mente. La ciencia lo dice.
Una buena manera de relajarse a costo cero es caminando. Más aún, si se realiza por zonas que estén rodeadas de verde. Así lo demuestra un estudio de la Universidad Heriot-Watt y la Universidad de Edimburgo, de Escocia, en el que se usaron electroencefalogramas portátiles para monitorear la actividad cerebral de 12 adultos jóvenes y sanos.
Los participantes del análisis debieron caminar a través de distintas áreas de la ciudad: un grupo por un circuito de compras histórico, otro por un parque y el último, por un movido distrito comercial. Y los resultados son aquellos que imaginas: caminar por un lugar rodeado de árboles tiene un efecto calmante y no requiere atención forzada, por lo que pasar tiempo en estos lugares «resetea» el cerebro.
Otros estudios han demostrado que quienes viven cerca de parques o concentraciones de árboles tienen niveles más bajos de hidrocortisona –hormona relacionada con el estrés–, que los habitantes de edificios rodeados sólo por concreto; y que los niños con déficit de atención suelen tener mejores resultados en exámenes cognitivos después de haber caminado por zonas arbóreas.
Jenny Roe, profesora de la Escuela de Entornos Construidos de la Universidad Heriot-Watt , quien supervisó el estudio, declaró para el diario The New York Times que aún cuando los escenarios naturales comprometen nuestra mente, hacerlo no requiere de ningún esfuerzo: «Se llama atención involuntaria en piscología. Mantiene nuestra atención mientras que al mismo tiempo permite un espacio de reflexión», explicó.
Aunque el estudio no se realizó con una muestra muy grande, los resultados son consistentes y demuestran que es conveniente pasear por áreas verdes cuando se quiere despejar la mente.
